LA COMIDA DE LOS "ORISHAS"Cada Orisha tiene su propia especialidad gastronómica y el saborearlas es potestad de cada uno de ellos.
Pero es cosa sabida que hay que tener mucho cuidado en la preparación de estos platillos, para acallarlos, para no exacerbar la ira de los diversos dioses de ese reino, para desviar su cólera temible y evitar que se encienda su enojo, cuando los animales elegidos por el Orisha para satisfacer su apetito y ofrecidos a su gusto en abundantes viandas, no han sido elaborados o preparados con suficiente esmero y dedicación.
Se hace necesario devolverles abundamente su dotación, en agradecimiento a la satisfacción de las súplicas, haciéndoles ofrendas y venerándolos por los favores recibidos.
El cuchillo sagrado, "Pinaldo", debe hundirse en el animal justo en el sitio esperado, evitando de esta manera las convulsiones violentas, para poder así, sin necesidad de utilización de utensilios o de cucharas, untarse los labios, sólo untárselos con la sangre recogida en una gran paila de barro o de madera.
Cazuelas especiales sirven para contener las preparaciones culinarias y las diversas maneras de disponer y ofrecer los animales de la preferencia de cada santo.
Los aromas de dichas comidas suelen ser penetrantes, cargando la atmósfera de tal manera que nuestro olfato percibe sensaciones particulares, las ollas emiten sus oleres donde los desconocidos guisos pueden depararnos deliciosos sabores por el punto justo de aderezo que maestros cocineros, sin ser chefs, preraran con esmero y dedicación, en ese difícil arte de rendirle tributo a las entidades supremas ofrendándoles los animales que posteriormente, luego de ser absorbida su esencia por los dioses, serán consumidos por los oficiantes, los creyentes y los múltiples asistentes que suelen estar presentes en dichas celebraciones.
T. Güerere