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jueves, 6 de junio de 2013

LAS GARZAS MENTIROSAS...

Las garzas mentirosas.
Igüí llegó un día corriendo a casa de Oshún que era su madrina y le contó que Olofin había mandado a las garzas, sus emisarias, a que lo apresaran porque le había robado un obí.

Oshún le dijo que no se preocupara, que ella iba a preparar algo que dejaría a las garzas muy sorprendidas.
Dicho esto, regó un líquido en la puerta de su ilé.
Cuando las garzas llegaron a casa de Oshún y pisaron aquel líquido pastoso, se quedaron pegadas en el piso y tuvieron que pedir auxilio a la dueña.
–Si me prometen que dejarán tranquilo a mi ahijado, las dejo ir –dijo Oshún muy desenfadada.
Las garzas asintieron y Oshún trajo una botella de su oñí y las despegó del piso.

Cuando volvieron al palacio de Olofin, este les preguntó si habían detenido al ladrón.
–No, papá, no lo hemos encontrado –dijeron.
Pero Olofin que no se creyó aquello, llamó a Eleguá y le dijo que averiguara bien lo sucedido.

Eleguá volvió al día siguiente y le contó toda la verdad.

Olofin llamó a las garzas para decirles:
–Como ustedes me han mentido, desde hoy las condeno a que se vistan siempre de blanco para verlas dondequiera que estén.