Características de los Omo
Elegua.
Los hijos de Elegguá son
inteligentes y hábiles, pero poco escrupulosos. Son habladores y pueden vender
hasta lo imposible si se les deja hablar. Son mujeriegos y poco caseros, les
gusta la calle. Se inclinan a la corrupción, el timo, la estafa y las intrigas
políticas, lo que les garantiza el éxito en la vida.
Patakies de Elegua.
Obí(el coco) era puro,
humilde y simple, por eso Olofin hizo blanca su piel, su corazón y sus entrañas
y lo colocó en lo alto de una palma. Eleguá, el mensajero de los dioses, se
encontraba al servicio de Obí y pronto se dio cuenta de que este había
cambiado. Un día Obí decidió celebrar una gran fiesta y mandó a invitar a todos
sus amigos. Eleguá los conocía muy bien, sabía que muchos de ellos eran las
personas más importantes del mundo, pero los pobres, los enfermos y los
deformados, eran también sus amigos y decidió darle una lección invitando a la
fiesta no solamente a los ricos. La noche de la fiesta llegó y Obí, orgulloso y
altivo, se vistió para recibir a sus invitados. Sorprendido y disgustado vio
llegar a su fiesta a todos los pobres y enfermos. Indignado les preguntó:
–¿Quién los invitó?
–Eleguá nos invitó en tu
nombre –le contestaron.
Obí los insultó por
haberse atrevido a venir a su casa vestidos con harapos.
–Salgan de aquí
inmediatamente –les gritó.
Todos salieron muertos de
vergüenza y Eleguá se fue con ellos.
Un día, Olofin mandó a
Eleguá con un recado para Obí.
–Me niego a servir a Obí
–dijo Eleguá–. Ha cambiado mucho, ya no es amigo de todos los hombres. Está
lleno de arrogancia y no quiere saber nada de los que sufren en la Tierra.
Olofin, para comprobar si
esto era cierto, se vistió de mendigo y fue a casa de Obí.
–Necesito comida y refugio
–le pidió fingiendo la voz.
–¿Cómo te atreves a
aparecerte en mi presencia tan harapiento? –le increpó el dueño.
Olofin sin disimular la
voz exclamó:
–Obí, Obí.
Sorprendido y avergonzado,
Obí se arrodilló ante Olofin.
–Por favor, perdóname.
Olofin le contestó:
–Tú eras justo y por eso
fue que yo hice tu corazón blanco y te di un cuerpo digno de tu corazón. Ahora
estás lleno de arrogancia y orgullo. Para castigar tu soberbia te quedarás con
las entrañas blancas, pero caerás y rodarás por la tierra hasta ensuciarte.
Además tendrás que servir a los Orishas y a todos los hombres. Así fue como el
coco se convirtió en el más popular de los oráculos.