ACERCA DE LOS RITOS EN OSHA-IFA
Ceremonias, Consagraciones e Iniciaciones.
"En Osha-Ifá existe un conjunto bastante diverso de ritos que implican una relación compromisoria del individuo con el sistema religioso.
Este compromiso es de diferentes grados según sean los ritos en los que haya participado la persona.
Las relaciones de compromiso puede ser temporales o de por vida de acuerdo al carácter de los mismos.
Ellos pueden ser Ceremonias Sencillas; Ceremonias de Consagración y Ceremonias de Iniciación.
En este artículo se hace un intento por diferenciar los tipos de ritos que se realizan en Osha-Ifá.
Existen, por ejemplo, ritos que implican ceremonias sencillas como realizar una consulta al oráculo; un ebbó; un ebbomisi; algún tipo de Paraldo; de rogación de cabeza; de Adimú, etc.
Estas ceremonias sencillas son las que se caracterizan porque el individuo al que se le realizan no requiere estar iniciado ni tener algún Orisha recibido.
El compromiso del individuo en relación a Osha-Ifá tan sólo existe durante el desarrollo y la ejecución de estas acciones.
A este tipo de ritos que se hacen por situaciones no tan graves se le denomina simplemente Ceremonias Sencillas.
Por otra parte, las Ceremonias de Consagración son un conjunto de ritos mediante las cuales el individuo recibe uno o varios Oshas u Orishas a los que se le podrían hacer ofrendas de animales de plumas y de cuatro patas.
Generalmente terminan con un Itá que rige la vida del individuo en el ámbito de acción de los Orishas recibidos.
Las Ceremonias de Consagración se realizan cuando el individuo se ve ante situaciones graves que no se pueden resolver mediante Ceremonias sencillas.
Las Ceremonias de Consagración tienen implícito un compromiso permanente del individuo con los Orishas que ha recibido y a quienes deberá atender de por vida con diferentes ofrendas de Osha-Ifá.
Pueden ocurrir antes o después de las Ceremonias de Iniciación.
Ejemplos de Ceremonias de Consagración son: recibir los "Guerreros" por Osha; recibir los "Guerreros" por Ifá; recibir los collares de Osha; recibir "Awó Fakán" o Ikofafún ni Orunmila; recibir algunos de los Orishas como Olokun, Orisha Oko, Ibeyis, Yewá, Obba, Inle, Añá, Oduduwa, Babalú Ayé, etc.; recibir Orun, Osain, Abita, Orí, Asowano, Odde, etc.; Medio Asiento de Osha; Lavar Osha; recibir Pinaldo en Osha y recibir Kuanaldo de Ifá entre otras.
"Pinaldo de Osha" y "Kuanaldo de Ifá" son dos ceremonias de consagración que se caracterizan por sólo poder ser realizadas por los individuos que han pasado la Ceremonia de Iniciación en Osha para recibir Pinaldo y los individuos que han pasado las Ceremonias de Iniciación en Ifá para recibir Kuanaldo. Cada una es un tipo de Ceremonia de Consagración que otorga poderes en el ámbito de los misterios de Osha-Ifá y en ellas no se recibe ningún Orisha.
En el caso de Orí, según sean las costumbres de las casa religiosa, es una divinidad que la pueden recibir todos a partir de tener los "Guerreros" o a partir de estar iniciado en Ifá o a partir de ser exclusivamente Omó Odun.
La Ceremonia de Iniciación en Osha tiene una duración de siete días.
Está constituida por un conjunto de ritos y ceremonias mediante los cuales al individuo se le consagra el Ángel de su Guarda y el conjunto de Oshas y Orishas relacionados a este Ángel de la Guarda.
Las ofrendas de animales de plumas y de cuatro patas son obligatorias y al individuo se le da a conocer el vaticinio (Itá) que predicen para su vida el Ángel de su Guarda y los Orishas acompañantes.
Este Itá rige todas las esferas de la existencia de esa persona. La Ceremonia de Iniciación sienta las bases para que el individuo pueda entrenarse como intérprete del Oráculo de Osha-Ifá, en general y, en este caso específico, intérprete del Oráculo del Dilogún y de Biange y Aditoto.
Las ceremonias de iniciación implican compromisos permanentes y obligatorios hacia Osha-Ifá como lo son la celebración del Cumpleaños de Osha (santo), ofrendas sistemáticas al Ángel de su Guarda; que se le realicen las Ceremonias Fúnebres o Ituto y la celebración de las Honras Fúnebres, entre otras.Generalmente, un individuo acepta y acuerda con el sacerdote hacer las Ceremonias de Iniciación en Osha cuando la energía de su espíritu y de su materia está afectada seriamente y se requiere potenciarla hasta el nivel que corresponde a esa persona. Esta fuerza, en el cuerpo humano, siempre está relacionada a Oshas u Orishas.
A la ceremonia de Iniciación se le llamó Kari Osha en la antigüedad y Yoko Osha después que se incluyó en ella a Obatalá, Yemayá, Oshún y Shangó, también conocidos como "Orishas de Cabecera".
La Ceremonia de Iniciación en Ifá igualmente dura siete días. Está constituida por un conjunto de ritos y ceremonias mediante los cuales el individuo adquiere la capacidad de interactuar con el Orisha Orunmila como divinidad rectora del oráculo de Ifá, tras un arduo entrenamiento y se convierte en Awó ni Orunmila o intérprete del Oráculo de Ifá. En esta Ceremonia de Iniciación también son obligatorias las ofrendas de animales de plumas y de cuatro patas y al individuo se le da a conocer el Itá que le vaticinan las divinidades de Ifá que corresponden.
Este Itá abarca todas los momentos de la existencia de esa persona y, al igual que en Osha, esta Ceremonia de Iniciación implica compromisos permanentes y obligatorios como los descritos para los iniciados en Osha y otras específicas que es la celebración del Día de Orunmila, la de su cumpleaños de iniciado en Ifá entre otras.
En Osha-Ifá, las Ceremonias de Iniciación sólo son dos: "Yoko Osha", "Asentar Osha", "Hacer Santo" o "Coronar Santo" como indistintamente se le ha llamado, e Iniciarse en Ifá o "Hacerse Ifá".
De una manera general y explicativa podría afirmarse que la Ceremonia de Iniciación consiste en lograr, mediante ritos y consagraciones muy especiales, rigurosas y discretas, que todo lo que existe en la naturaleza animada e inanimada y que exclusivamente pertenece a un individuo, potencie la energía de lo espiritual-material que contribuye al equilibrio y la armonía necesarios para que el sujeto de la Iniciación exista favorablemente en todos los momentos en que tenga que desarrollarse en el plano terrenal durante el trayecto de su vida, siguiendo los consejos que se le dan en el Itá de la Ceremonias de Iniciación.
En Osha-Ifá sólo tienen que pasar las Ceremonias de Iniciación los individuos cuyo equilibrio y armonía no son los adecuados para que, a través de la Iniciación, logre el balance buscado.
También hay personas que están llamadas a servir al sistema oracular por sus altas virtudes.
Esto se sabe mediante la correspondiente consulta con uno de los subsistemas oraculares- el de Ifá o el Dilogún- e interpretando correctamente los Odun y letras salientes.
Ernesto Valdés Jane Adé YeríOmar García Ruiz