ADDE IRAWO ."Ikú lobi
ocha"
Los muertos (ikús) o espíritus que nos rodean
(egguns) deben de estar atendidos y conformes, por lo cual se les respeta tanto
como a los dioses (orishas). La reverencia a los antepasados es uno de los
pilares de las religiones africanas.
En la religión Yorubá el muerto pare al santo (ikú lobi ocha) y antes de
invocar y pedir permiso (moyubbar) y saludar a los orishas hay que invocar a
los muertos. Esto se debe a que todos los orishas fueron seres vivos
En la religión Yorubá la representación superior del
muerto es Oddúa como orisha o camino de Obbatalá, su nivel es muy alto pues se
encuentra después de Olofi (SER SUPREMO).
En toda actividad de la Regla de Ocha o parte material, primero tenemos que
cumplir con los egguns y pedirles permiso para lo que se vaya a hacer para lo
cual se les moyugba.
Los muertos comen antes que Elegguá y separados de los orishas. En determinadas
ceremonias se les ofrenda una vela (ataná), coco (obi) en nueve pedacitos que
es la marca el muerto, agua fresca (omi tutu), aguardiente (otí), café (omi
bona), tabaco (achá), pimienta de guinea (ataré), y se utiliza la cascarilla
(efún). Esta ofrenda se sitúa en el piso fuera de la casa o en un vertedero o
caño interior de no existir patio y se dispone dentro de un círculo o rectángulo
(atena) dibujado con cascarilla en cuyo interior se pueden dibujar signos y
firmas.
La ceremonia se inicia con la moyugba correspondiente y la declaración del
sentido de la ofrenda. Esto se puede realizar mientras se les brinca coco
fresco a los muertos lo cual se hace en pequeños pedazos que se tiran hacia el
interior de la figura trazada en el piso. Esta ofrenda es obligatoria cuando se
va a sacrificar un animal de cuatro patas.
Al terminar se preguntará a los egguns o eguns si recibieron la ofrenda, si dan
su conformidad y hacia donde se llevan los residuos. Esto se hará con cuatro
pedazos de coco fresco según las reglas para la lectura del coco.
Otros religiosos plantean que los muertos no deben comer en el interior de las
casas por lo que su comida se les servirá en el patio y lejos de la vivienda. A
los muertos se les puede ofrecer agua, pan, bebida, tabaco y alimentos
cocinados sin sal lo cual puede ser la comida que prefería el difunto si la
ofrenda es para un muerto determinado o un ajiaco con cabeza de puerco.
Todo esto se sitúa en un plato roto y se encenderá una vela; al día siguiente
se hace la moyugba y se pregunta mediante los cocos el lugar donde ha de
botarse la comida, esto ser en la manigua (nigue), en la basura (ikún), en una
loma (ilé oké), en el río (ilé oshún), etc.
Los presentes en estas ceremonias con los muertos deben ser marcados con una
cruz de cascarilla en la frente como protección, los ya iniciados que en su Itá
Malé tengan ofun (¡0), se marcan en el brazo.
En el espiritismo o parte espiritual el tratamiento que se le brinda a los
espíritus es distinto, varía de acuerdo a que sea espiritismo puro o influido
por Ocha, el Palo, u otra religión.
En algunos casos los espíritus se atienden con una bóveda espiritual que se
monta más o menos compleja según lo requiera el cuadro espiritual de la
persona. En uno de los vasos de agua que conforman la bóveda se colocará un
crucifijo. Un espiritista será quien determine la conformación definitiva de la
bóveda y la podrá abrir en una sesión espiritual que se realizará en el lugar.
La bóveda espiritual contribuye a fortalecer a los guías y protectores de la
persona, que pueden ser conocidos o no y entre los cuales se incluyen sus
familiares muertos. Cuando un creyente desconoce su cuadro espiritual puede
invocar a sus protecciones con nombres temporalmente asignados hasta
investigar. Una atención a los espíritus está constituida por el vaso de agua o
"asistencia" que se les dedica.
En el espiritismo más puro, la ceremonia de invocación se hace mediante
oraciones y cantos. Son muy utilizadas las oraciones al Angel de la Guardia, a
los guías y protectores, etc.
En el espiritismo practicado en Ocha se utiliza el vaso de agua, el agua
bendita, perfume, velas, flores y determinadas hierbas para despojos. También
se puede emplear la cascarilla como filtro protector así como el tabaco y el
aguardiente según los gustos del muerto.
En algunas sesiones espirituales a las personas que se les incorporan entidades
espirituales (instrumentos o caballos), o sea, pasan o montan muertos, piden
tabaco y aguardiente al ser poseídas los cuales habrá de tenerse a mano. En el
campo espiritual también se emplean la misa espiritual y la misa católica en la
iglesia. Ambas formas se emplean para darle luz a los muertos y elevarlos.
Si hay daño por un muerto oscuro o uno enviado desde un "caldero de
palos", este debe ser eliminado primero en su aspecto espiritual mediante
recogimientos, despojos, pasar el muerto, misas, etc. y después hacer el
rompimiento en el campo material con ebbos, purificaciones, baños, etc.
La relación entre el espiritismo y la religión Yorubá es muy estrecha porque
sin la atención a los muertos nada sale bien pues el muerto es primero.
"Maferefún egguns"